Tijuana BC, 08 de diciembre de 2019.- De entrada sobre mesa la “Milonga Feroz” y la apacible alma del guitarrista de Latinoamérica Roberto Limón. Parece tan extraño ver a los grandes de cerca y platicar con ellos como si fuese algo frecuente. Así empezó la charla, con la victoria de ver sobre la mesa un disco compacto, como antes, como en los años noventa, a lo que de inmediato dije, que me parecía todo un acto revolucionario grabar un acetato en estos tiempos, donde las plataformas digitales son lo de hoy para la música y su divulgación, pero sobre todo, cuando muchos de nosotros que tenemos autos de no reciente modelo seguimos teniendo la foturna de poder insertar el CD que queremos escuchar; y en efecto, no me equivoqué.
Después de una amena entrevista en los que tocamos temas como el hecho de haber solidificado una carrera que implicaba largos viajes lejos de casa, la creación, perdurabilidad y promoción de la música a través del Festival Hispanoamericano de Guitarra, actividad que de verdad se extraña en la región, el haber pisado los más importantes foros como guitarrista en México, España, Grecia, Portugal, Alemania, República Checa, Rusia, Lituania, Puerto Rico, Costa Rica y Estados Unidos, el maestro Limón, toma un vertiginoso tiempo de 24 meses para sacar a la luz la “Milonga Feroz”, de la mano de grandes arquitectos musicales, quienes también refieren un homenaje musical a las letras de Octavio Paz y Jorge Luis Borges, en este producción discográfica sin precedente.
Aquí, bien cabe hacer un merecido paréntesis para hablar de la importante labor que en esta producción representa el maestro Alberto Núñez Palacio, creador del tema que da nombre a la misma y quien además fungió como consejero artístico. Núñez Palacio, es compositor, arreglista y productor, ha radicado en nuestro México desde 1981; dedicando la mayor parte de su tiempo a la música popular y a la de concierto. Ha recibido un sinnúmero de reconocimientos y premiaciones como el haber sido distinguido como Creador Emérito y Decano de la Orquesta de Baja California, institución de la que también fue compositor residente y director del conservatorio de la misma.
Así, a través de su “Milonga Feroz”, rinde tributo a uno de sus primero amores juveniles: el tango.
Volviendo al tema, debo confesar que la entretenida charla con el maestro Limón, solo representaba una urgencia: salir corriendo al automóvil y escuchar la joya. Y es que es eso, una joya rara y sutil, que empata a la guitarra con bandoneón, cuerdas, oboe, flauta, percusiones afrolatinas y la voz; siendo el centro de todo la guitarra de Limón, que nos da un recorrido con su muy particular sello interpretativo, donde la sonoridad del mismo nos abre una ventana de exposición auditiva evocándonos a otros universos vecinos como Argentina, Chile y Puerto Rico para descalzar el caminar en México, en el que además uno puede escuchar la creatividad hecha canción de Octavio Paz y Jorge Luis Borges.
Cabe resaltar la participación del gran César Olguín, bandoneonista de gran trayectoria y renombre y quien actualmente dirige la Orquesta Mexicana de Tango. Además de la cadencia y ritmo del Cuarteto Latinoamericano, así como de los maestros compositores Gerardo Tamez, Ernesto Cordero, Javier Farias; los músicos Rafael Urrusti, Asako Arai, Carmen Thierry, Omar Firestone, la extraordinaria voz de Carmina Vannavino y las percusiones de Leah Bowden.
Así es Roberto Limón, sorprendente en sus interpretaciones en vivo y en sus producciones musicales, virtud que no debería extrañarnos si consideramos que diversos compositores como, Manuel Enríquez, Joaquín Gutiérrez Heras, Leonardo Velásquez, Eugenio Toussaint, William Ortiz, Alberto Núñez Palacio, Ernesto Cordero, Dimitri Dudin, Francisco Núñez, Manuel de Elías y Meyer Kupferman le han dedicado su obra, porque en su guitarra no hay una simple ejecución de pisadas por trasto y rasgueos contados, no. En la guitarra de Limón se encuentra la peculiaridad de un sonido nítido que articula palabras que no se pronuncian, pero sobre todo sonidos que no tienen igual.
Es importante resaltar que el virtuosismo de Limón en la guitarra llevó al intérprete a una nominación al Grammy Latino en el año 2001 con su producción para orquestas y guitarra Tango mata Danzón mata Tango en la categoría de Mejor Álbum Clásico y él mismo Limón también fue nominado en ese mismo año en la categoría de Mejor Solista.
“Milonga Feroz”, es una gran excusa para expandir el repertorio de la guitarra, pero también para disfrutar de nuevas concepciones musicales que nos muevan el alma y el cuerpo al mismo tiempo. La obra fue editada bajo el sello de Fonarte Latino y ya está en todas las plataformas digitales.