Tijuana BC, 01 de febrero de 2021.- Como una maldición ha resultado el tiempo de pandemia extendida, hecho que no ha permitido la reactivación artística en Baja California y por ende en esta frontera.
Así, los teatros, conciertos, presentaciones y otras afinidades han quedado en la incertidumbre, trayendo con ello una gran pérdida en la generación de audiencias para las artes escénicas y visuales.
La comunidad artística cultural independiente, que no goza de apoyos institucionales se ha tenido que conformar con la transformación de su actividad presencial a innovaciones en línea, donde el principal obstáculo a vencer lo es la amplitud de viewers para sus presentaciones virtuales.
Con esto, también se limitan los procesos creativos si tomamos en cuenta que muchos de ellos se nutren de nuestra dinámica social y otros contextos como el económico y político de un país.
Sin embargo,la comunidad artística es aguerrida y le ha hecho frente a la pandemia con respeto y contra viento y marea ha continuado su actividad.
Hay algunos que se han reinventado haciendo uso de la tecnología aunque no siempre logrando las mejores piezas tanto en teatro como en danza, otros se han conformado con auto grabarse con sus móviles haciendo movimientos dentro de sus casas y mostrándolas en sus redes, pero sin duda, se alejan infinitamente de lo que es la verdadera actividad escénica.
No hace más de dos semanas el maestro Gregorio Coral, bailarín y coreógrafo de danza contemporánea y director de una de las agrupaciones más emblemáticas de la ciudad, Subterráneo danza, lanzó una iniciativa en redes sociales de nombre «Reactiva Tijuana», que lleva como fin la programación de espectáculos en espacios abiertos.
Sin embargo, hasta el momento ninguna institución cultural ha dicho «esta boca es mía» en términos de arropar la iniciativa con el apoyo de la gestión de permisos para la realización de actividades artísticas, mucho menos con la infraestructura económica que permita establecer una programación respaldada por todas las medidas de sanidad anti-COVID y que así la actividad artística de la frontera recobre fuerza económica, pero sobre todo nivel creativo en tiempos de absoluta depresión para la generación de productos artísticos de calidad que a su vez conlleven al rescate de las audiencias.
La frase «muy pronto nos volveremos a encontrar» que hace alusión a la reapertura de los teatros, cines y auditorios, está más lejana de lo que parece.
